En esta parte de mi exposición TEOLOGÍA Y PSICOLOGÍA DE LA SEXUALIDAD es donde hablare que la ciencia de la sexologia puede ser injertada en la revelación de la teología llamándose teología sexual, mi deseo es que este mensaje sea luz de la gracia Divina para nuestra iglesia. Los invito primeramente a que entremos a la sala de cirugía (lugar santísimo) mediante intervención quirúrgica exhortativa (Espíritu Santo) y hagamos una incisión crucial en nuestro corazón para proceder a la apertura de los tejidos del alma, con el fin de llegar a los planos más profundos, o bien para delimitar lesiones tumorales y extirpándolos y poder realizar, de esta manera, el objetivo de la intervención quirúrgica en nuestra mente y alcanzar la metánoia en cada uno de nosotros como miembros del cuerpo de Cristo.
Esto para poder ser luz en las tinieblas en que nos encontramos; por debates religiosos y sectarios en que están cayendo la mayoría de congregaciones al desconocer las ciencias humanas y científicas, como parte del hombre, sociedad y humanidad que necesitan ser purificadas con la Palabra de Dios, esa intervención Divina que solo puede ser a través de cada uno de nosotros. Como esta escrito en uno de los libros de un hermano que por gracia del Señor lo usa, se titula el Reto de Dios, si, el reto de Dios es que confiemos en el y lo dejemos brillar por medio de nosotros.
Enfoque teológico de la sexualidad: Profesamos que Dios es el autor de la sexualidad humana, la cual entendemos como una necesidad emocional y física totalmente natural. Según Génesis 1:28, es evidente que las relaciones sexuales entre individuos del sexo opuesto, heterosexuales, fueron dispuestas y ordenadas por Dios bajo la unica condición el casamiento. Mucho antes que Adán y Eva pecaran, Él les ordenó: «Fructificad y multiplicaos; llenad la Tierra». A continuación, en el versículo 31 del mismo capítulo, dice: «Vio Dios todo lo que había hecho lo cual claramente incluía al primer hombre y la primera mujer con sus cuerpos y su sexualidad, y he aquí que era bueno en gran manera».Por lo tanto, consideramos que las relaciones heterosexuales, cuando se practican tal como Dios dispuso entre personas consintientes de su responsabilidad y sanas en su manera de actuar sexualmente son puras y permisibles conforme a las Escrituras, y una de las maravillas de la creación divina.
Profundicemos un poquito sobre que argumentos hay para sustentar la teología de la sexualidad. Richard
M. Davidson expone la siguiente tesis donde
me adhiero. Dios
creó al hombre a imagen suya, a imagen de Dios, lo creó, varón y hembra los
creó. 28 Y bendijo a Dios ellos, y Dios les dijo: "Sed fecundos y
multiplicaos, y llenad la tierra y sometedla. Se ha señalado con razón que la
discusión entre los teólogos en este pasaje se ha centrado principalmente en el
significado de hombre la creación de la "imagen de Dios", y ha ignorado
casi por completo de la afirmación, además, que la humanidad se creó hombre y
mujer.
En armonía
con las preocupaciones de este estudio debe centrarse en particular en la
declaración descuidada - "varón y hembra los creó ellos "- sin dejar
de lado la cuestión de la imago Dei y el un contexto más amplio del
capítulo. Las ideas fundamentales en la teología de la sexualidad humana
que surgen del Génesis son 1:01-02:04 que aquí se exponen cinco razones más importantes.
En la
creación el hombre como unidad (hijo de hombre) de la cláusula relativa como varón y mujer (Gn
1,27 c) observamos, en primer lugar, que la diferenciación sexual es presentada
como una creación de Dios, y no forman parte del orden divino en sí. Este
énfasis en la creación de la distinción sexual parece formar una polémica
sutil, pero fuerte en contra de la "" divinización "del sexo
" tan común en el pensamiento de los vecinos de Israel. A lo largo de la
mitología del antiguo Cercano Oriente, la explotación sexual, las actividades de
los dioses forman un motivo dominante. El mito de la fertilidad era de especial
importancia, sobre todo en la Mesopotamia y Palestina. En la creación del culto de la fertilidad se celebraba a menudo como resultante de la unión de
las deidades masculinas y femeninas: "La cópula y la procreación eran
considerados míticamente como un acontecimiento divino. Con-posteriormente
la atmósfera religiosa era tan bueno como saturado de concepciones míticas sexuales”.
En
contraste con este punto de vista de la creación como la procreación divina, la
cuenta de Gen 1, con su énfasis en el Dios trascendente (Elohim) y una
visión cósmica de la creación, postula una separación radical de la sexualidad
y divinidad. Dios está "absolutamente más allá de la polaridad de las
relaciones sexuales. " Las diferencias sexuales se presentan como una
creación de Dios no
forma parte del orden divino, una dualidad desde el principio.
La distinción sexual
La
distinción sexual entre hombres y mujeres es fundamental para lo que significa
ser humano. A ser humano es vivir como una persona sexual. "No
podemos decir que el hombre sin tener que decir hombre o mujer y también
masculina y femenina. El hombre existe en esta diferenciación, en este la
dualidad. " la distinción sexual, se la presenta en Génesis 1 como un componente
básico en la creación original de la humanidad.
Igualdad
de los Sexos
Una
tercera idea en la teología de la sexualidad humana se deriva desde el
emparejamiento igual de hombres y mujeres en paralelo con ha-adam en Génesis
1:27. No hay ningún indicio de ontológica o funcional superior o
inferioridad entre hombres y mujeres. Ambos son "igualmente inmediata
con el Creador y Su acto. " Ambos
son para compartir por igual en el la bendición y la responsabilidad de la
procreación (v. 28). En resumen, tanto participar por igual en la imagen
de Dios.
Integrales
Una
visión teológica cuanto a servirse para
reducir nuestra exposición de "varón y mujer" a la image de Dio. En
Génesis 1:27 el genérico plazo para la humanidad (haadam) incluye
tanto hombres como mujeres."El
hombre y la mujer junto al hombre."
La integral
imagen de la humanidad sólo está completa cuando tanto hombres como mujeres son
vistos juntos. Tales puntos descripción a la individualidad y la
complementariedad de los sexos, y será más desarrollado en Gn 2.
Relación
La existencia de la bipolaridad de los sexos en la creación implica no sólo en que son la distinción sexual, pero son llamados a la unidad en su relación. el significado de la existencia humana no está en masculino o las mujeres de forma aislada, sino en su mutua comunión. La noción de la comunión hombre-mujer en Gen 1 ha sido particularmente enfatiza. El hombre-en-comunión, como varón y mujer es lo que significa estar en la imagen de Dios. Una idea final de Gen I en la teología de la sexualidad humana se desprende de la evaluación personal de Dios de su creación. Cuando "vio Dios todo lo que había hecho" - incluyendo la sexualidad de su obra maestra de la creación - "¡Mirad! que era muy bueno. "La expresión hebrea tob meod ("muy bueno") connota la quintaesencia de la bondad, la salubridad, a proveniencia, la belleza.El silogismo es sencillo. Sexualidad (Incluido el acto sexual) es parte de la creación de Dios, parte de su acto de coronación. Y la creación de Dios es muy buena. Declara el primer capítulo del Génesis, el sexo es bueno, muy bueno. No es un error, una aberración pecadora, una "necesidad lamentable", una experiencia vergonzosa como a menudo ha sido considerado en la historia de la cristiana, como también en el pensamiento pagano. Por el contrario, la sexualidad humana (como tanto un estado ontológico y una experiencia relacional) es parte del diseño perfecto de Dios desde el principio y querido como un aspecto fundamental de la existencia humana. Para algunos lideres es un tabú tocar estos temas en el púlpito por falta de conocimiento o por conceptos erróneo de su sexualidad. La sexologia nos habré una visión a través de la teología que debemos considerarla. ¿porque hay silencio en los púlpitos sobre este tema? ¿sera que muchos están solo con el primer toque y les falta ese segundo toque para fundirse en Jesús el Cristo?. A continuación para empezar vamos hablar de los Influjos de los dualismos en la sexualidad y espiritualidad en la iglesia.
Trascribo lo que expresa otro hermano; El dualismo del helenismo tardío, tal como aparece expresado en el gnosticismo y en el estoicismo, no tuvo su origen en fuentes judías o cristianas. Sin embargo, influyó profundamente en todas las comprensiones posteriores de la vida sexual y espiritual del cristianismo. Estudiar algo de la tradición cristiana nos ayuda a entender que la teología sexual nunca es pura, sino que siempre encuentra su configuración en la relación con los contextos corporales en los que viven los cristianos. Por lo demás, la comprensión de nuestra herencia religiosa nos ayuda a reconocer las formas en las que se puede no sólo modificar la tradición, sino también introducir cambios fundamentales en la sexualidad humana y la vida espiritual.
Los hombres espirituales tenemos que vivir en contacto con la realidad sexual, si no queremos caer en gnosticismo o idolatría al cuerpo y sus pasiones sexuales aérea que es la mas usada por los demonios. El peligro que amenaza siempre a los hombres de fe es no vivir con los pies en el suelo "discernimiento", en contacto con la realidad sexual y espiritual, tenemos que ayudarnos unos a otros a aceptar el hecho de que quienes somos cristianos somos herederos de una tradición religiosa que ha despreciado el cuerpo sexuado, sexual y erótico como portador y a través del cual podemos y vivimos nuestra vida espiritual y por ello ha negado y reprimido la relación esencial entre sexualidad y vida espiritual cristiana.
Los hombres espirituales tenemos que vivir en contacto con la realidad sexual, si no queremos caer en gnosticismo o idolatría al cuerpo y sus pasiones sexuales aérea que es la mas usada por los demonios. El peligro que amenaza siempre a los hombres de fe es no vivir con los pies en el suelo "discernimiento", en contacto con la realidad sexual y espiritual, tenemos que ayudarnos unos a otros a aceptar el hecho de que quienes somos cristianos somos herederos de una tradición religiosa que ha despreciado el cuerpo sexuado, sexual y erótico como portador y a través del cual podemos y vivimos nuestra vida espiritual y por ello ha negado y reprimido la relación esencial entre sexualidad y vida espiritual cristiana.
Si deseamos estar sanos en nuestra conducta sexual y vivir una rica y transformadora vida en el espíritu, tenemos que poner en tela de juicio esta tradición y transformarla radicalmente. Se requiere algo más que una simple reforma. Me refiero a una transformación. No podemos dejar de hacer menos para ser creíbles hoy en nuestra vida de fe. Nuestro silencio no nos protegerá. Nuestra mejor protección es buscar y decir la verdad de nuestra vida sexual y espiritual mientras podamos, con la presencia y ayuda mutuas, y cultivar juntos cuidadosamente algunas verdades de la relación y unidad de ambas realidades que no podemos decir todavía, verdades que quizá sean aún jóvenes y no estén deformadas. Con las verdades que aportamos seguimos dando forma a la historia de la vida sexual y espiritual.Continuara.......
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